Viajar en tiempos romanos III
Los romanos se ubicaban principalmente por las colinas, los valles o los barrios y administrativamente se dividían por regiones.
Las zonas altas de las colinas eran para los ricos mientras que las zonas bajas eran para la gente más humilde.
Las casas que dan a las calles más concurridas solían tener habitáculos con tiendas para comprar comida, artesanía, ropa...
Los muros estaban pintados de color rojo en la parte inferior mientras que en la superior utilizaban el blanco. Los muros exteriores de las fachadas no tenían ventanas, solamente disponían de una puerta vigilada porque las noches eran tremendamente peligrosas.
La primera habitación que nos encontramos es el vestibulum (vestíbulo) generalmente con un mosaico saludándonos (salue) o advirtiéndonos de la presencia de un perro (cave canem).
A continuación nos encontramos con el cielo abierto donde se recoge el agua de la lluvia (atrio). Alrededor de este aparecen las habitaciones (cubículas) para relajarse.
En la ciudad nos encontramos con las insulae que son los bloques de apartamentos.
Como curiosidad, a lo que más temían los romanos era a los incendios.